Una emergencia invernal mantiene en alerta al municipio de Medio Baudó, tras las fuertes lluvias registradas en la madrugada del domingo 3 de agosto. La creciente del río Baudó y varios de sus afluentes dejó un saldo preliminar de 1.928 familias damnificadas y más de 7.700 personas afectadas, especialmente en sectores como Villa Nueva, Porvenir, Pitalito y El Silencio.
Varias comunidades afro e indígenas ubicadas en las riberas del río Pepé también sufrieron afectaciones severas. En total, 8 viviendas fueron destruidas y otras 18 quedaron parcialmente dañadas, además de pérdidas materiales como enseres, electrodomésticos y cultivos de plátano, yuca, maíz y caña.
La Administración Municipal de Medio Baudó, a través del CMGRD, continúa con la verificación de daños, atención a las comunidades y recopilación de información en terreno. Actualmente, 18 familias han sido trasladadas a albergues temporales, mientras se evalúan más soluciones de emergencia.
Las lluvias no cesan en la región, lo que mantiene en máxima alerta a las autoridades y a las comunidades ribereñas, especialmente tras el reciente desbordamiento del río Berreberre, que afectó a 133 familias más en zonas como Bellavista, Almendro y Puerto Elacio.
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