En la cita, el ambiente fue de derrota. Petro, visiblemente inquieto, reconoció que este era un gran golpe contra su gobierno y atacó a Sanitas.
El Gobierno tiene claro que el archivo a la reforma a la salud ya no tiene reversa. Pero insistirá con todo su fervor en volverla a presentar. Así lo confirmó SEMANA con varios altos funcionarios de la Casa de Nariño. La decisión definitiva se tomó en una reunión que tuvo el presidente con sus ministros a puerta cerrada y en medio de la más absoluta reserva.
La cita tuvo lugar este miércoles 3 de abril a las 5:00 de la tarde. Asistieron el primer mandatario, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco; el de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y la directora del Dapre, Laura Sarabia. En el encuentro hubo tres personas más, pero los nombres no fueron revelados.
Una fuente de alto nivel le confirmó a SEMANA que en el encuentro quedó sobre la mesa el error de cálculo de la intervención de la Superintendencia de Salud de la EPS Sanitas, justo un día antes de la votación de la reforma a la salud en la Comisión Séptima del Senado.
SEMANA también conoció que el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, no estuvo de acuerdo con ese Plan B porque él conoce como pocos el Congreso y sabe que la estrategia será desgastante y suicida, ya que el proyecto de ley tendría que iniciar desde el primer debate en la Cámara de Representantes y corre contra el tiempo porque el 20 de junio de 2024 es la fecha de aprobación de la iniciativa.
Velasco –quien cada vez parece más solo luchando por empujar las reformas en el Congreso–, no confirmó la versión, pero la fuente de alta credibilidad dijo que el ministro de la política no conocía oficialmente que Sanitas y la Nueva EPS iban a ser intervenidas justo en medio del debate.
